Que da igual
cuántas vayan a verte,
yo ya te he leído
y eres la página
que nunca he querido
terminar.
Y podrán pasar
centenares,
miles de ojos nuevos
y diferentes,
pero ya te he hecho libro.
Y no vas a irte,
no voy a perderte;
porque te he hecho cicatriz.
Y te llevaré orgullosa,
y me mirarán al pasar
y de esa herida abierta
echaré gaviotas a volar
al mar
de tu ojos. .
Que da igual
cuántas puedan cruzar
entre los dos universos
que mueves con tus manos;
sólo yo lo hice
saliendo con vida.
Te gané,
ya eres mía.
Porque aunque no estás
(ni vas a volver)
te he resumido en un verso
y te he hecho poesía.
Mira,
estás
justo
aquí.
__________
Metáforas reversibles.
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