miércoles, 15 de junio de 2016

(CONTRA)DICCIONES

Ni las casualidades,
ni el destino,
ni la coincidencia,
tendrán nunca más fuerza
que la contradicción.
 
Y de todas las contradicciones potenciales
la tuya es la más contradictoria.
 
Fíjate bien;
vuelas echando raíces en cualquier tierra;
ves más con los ojos cerrados;
brillas si la oscuridad nos deja a ciegas
y ninguna cima es más caída que la tuya.
Das más de lo que pides;
lloras cuando sonríes
(porque hay un mar que deja subir la marea en tus ojos).
Eres el camino y la casa;
subes igual que bajas;
acaricias y arañas
con las mismas manos y tu ausencia.
Llegas tarde y siempre es pronto cuanto te has ido;
lees antes de saber si quiera
que hoy también te había escrito.
Eres contienda y paz;
eres barco y naufragio.
 
Si me dejaran contradecirte,
te diría que tienes lluvias y soles,
silencios y canciones
(que por cierto nunca cantas).
Te driría que tienes espinas y lunares,
calmas y tempestades
y la vida en un verso que no se ha leído.

Pero sé que nunca crees nada
de todo lo bonito que te digo
(aún a sabiendas
que jamás te he mentido).
Porque eres así,
una mujer de contradicciones.

__________
El suspiro rojo de los atardeceres.



Fotografía de María M. H.

No hay comentarios:

Publicar un comentario